Aquí yo, allá él

Ando re contenta y re volada. Pude ver y escuchar a Israel, que está de viaje, gracias a la tecnología del video-chat: ¡es la onda! Hasta pude conocer a Huchín, pude intercambiar "holas" con Mónica Nepote, y pude saludar a varios ensayistas que se encontraban en el restaurante de un hotel veracruzano. Y todo gracias a las Macbook y a la red del hotel.

Cuando tenía 8 años, mi hermana y yo alucinábamos con todos los inventos que habría cuando llegara el futuro: teléfonos con video, ropa que no se ensuciara nunca y carros voladores. Y uno de tres no está nada mal.

Pero por lo menos hoy, yo pude ver y escuchar a Is.

V.